
Antología de poesía indignada editada por la editorial Origami, en la que un centenar de poetas de todo el estado reunidos en esta asamblea de papel también convierten sus palabras en palabra pública, de todos, para todos. Es poesía para ser dicha, en voz alta, en grupo, en la calle. Poesía que rompe la privatización de la palabra poética, que rechaza que la poesía sea un acto íntimo, silencioso, individual, y apuesta por socializarla, leer hacia fuera, leer en la calle, convertirla en palabra pública, es decir, en palabra política, que como tal es una amenaza para quienes sólo quieren vernos en las plazas cargados de bolsas, y sólo quieren oírnos si hablamos con sus palabras.